Jalpan

Jalpan , (Lugar sobre la arena) , El Corazón de la Sierra Gorda , Este majestuoso capricho de la naturaleza concebido desde tiempos inmemoriales, alberga un patrimonio natural y cultural con tanta diversidad que cualquier interpretación de esta región se queda invariablemente corta. Desde las primeras luces del alba, esta tierra muestra sus bondades, el coro de cientos de aves de múltiples especies celebran con un estruendoso canto la llegada de un nuevo día. Las vaporizastes aguas de la presa son un santuario y refugio para la gran variedad de aves endémicas y migratorias. Jalpan de Serra, ubicado dentro de la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda, alberga una gran cantidad de ecosistemas como sus montañas, sus ríos, sus bosques y semidesiertos. Son habitat de una gran biodiversidad de flora y fauna., Mientras las luces del alba despojan a las estrellas de su brillo, el astro rey hace su aparición detrás de las montañas, si es invierno, el espectáculo es mayor, ya que puede verse incendiar el cerro de Tancama cuando el sol emerge de él. Tancama (cerro de fuego), este sitio arqueológico orientado en evidente conexión simbólica y astronómica a dicho evento. , En contraste, las misiones franciscanas fundadas por Fray Junípero Serra en el siglo XVIII, para algunos, una utopía cristiana y humanista, para otros un proceso de sometimiento, despojo y explotación de la población; dan testimonio del mestizaje de esta región. , Tiempo bordado por la mano indígena, labrado en piedra con el pensamiento cristiano, españoles e indígenas fusionados en la sierra gorda, dan paso a una desbordante riqueza biocultural. , Actualmente aromas y sabores llenan el ambiente, manos que tejen la palma así como la vida, manos que construyen, que moldean el barro y los sueños, que siembran y cosechan entre versos y décimas, pies que zapatean sobre la tarima al ritmo de una quinta huapanguera, de una jarana acelerada y del melódico violín, coplas y versos con agudos falsetes capaces de despertar pasiones, parejas de hombres y mujeres sin abrasarse, sin tocarse; con tan solo la intención y el sentimiento, las miradas, los giros y el aparente desdén femenino y el ruego de su pareja, constituyen un lenguaje codificado para requerir amores dejando translucir el gusto y las apetencias. Así se vive el Son Huasteco por acá, que enmarca este mosaico cultural y ambiental llamado Jalpan de Serra. , Prof. José Gilberto Bustos Resendiz ,